Cuando yo me vaya déjenme ir tengo muchas cosas que hacer y ver. No se aten a mi con lagrimas. Por los años que vivimos juntos demos gracias a Dios. Yo les doy mi amor y ustedes pensarán en la alegría que me manifestaron. Le doy las gracias a todos y cada uno por el amor que me brindaron. Pero ahora tengo que partir. Si tienen que llorar, lloren solo un instante y dejen que la fe en Dios conforte su pena. Solo nos separaremos un momento. Mantengan los recuerdos en sus corazones. La vida sigue adelante y yo estaré lejos. Si me necesitan piensen en mi y entre ustedes estaré.
Recuerdo de sus padres, esposa, hijos y hermanos.